Los parásitos son animales ó plantas que viven a expensas de otros seres. Los que más seguido enferman a la gente, son las lombrices intestinales ó ascaries, las amibas, la solitaria ó tenia, los alfilerillos u oxiuros, la giardia y el tomatillo ó cisticerco. Entran al organismo por la boca, a través de la ingestión de quistes o huevecillos que son arrojados en el excremento de personas ó animales parasitados. Los podemos adquirir al beber agua sin hervir ó purificar, al consumir frutas y verduras sin lavar ó desinfectar, alimentos contaminados por el polvo ó los insectos y carne mal cocida de animales parasitados; también, por no lavarse las manos antes de comer ó después de ir al baño. Los parásitos, al llegar al intestino, roban el alimento e impiden el aprovechamiento de los nutrientes. Algunos parásitos atacan otros órganos como hígado ó cerebro y ocasionan complicaciones como ataques convulsivos. En los niños, también provocan falta de crecimiento. Un niño probablemente tiene parásitos si presenta:
Cuando una persona tiene parásitos, lo más probable es que otros miembros de su familia también los tengas, por lo que el tratamiento se les debe dar a todos. |